¿Por qué es habitual enfermar en vacaciones?
Meses y meses de duro trabajo ansiando unas merecidas vacaciones y, cuando llegan, enfermas repentinamente. Seguramente conozcas a alguien que le haya pasado esto o incluso lo hayas padecido personalmente. Y es que lejos de ser un fenómeno excepcional, en la práctica clínica se ven personas que sufren diferentes afecciones durante su tiempo libre.
Es lo que se conoce como enfermedad del ocio. Un término acuñado por el psicólogo holandés Ad Vingerhoets, que en 2002 publicó los resultados de una encuesta realizada a más de 2.000 personas de quienes un 3% se reconocían en la descripción de este fenómeno.
Ahora bien, a pesar de su nombre, no se trata de una patología reconocida oficialmente, sino un término utilizado para describir síntomas físicos y emocionales que aparecen durante los periodos de descanso, como las vacaciones o los fines de semana. Veamos en qué consiste.
¿Qué es la enfermedad del ocio?
Aunque no se trate de un trastorno como tal, la enfermedad del ocio se manifiesta a través de diferentes síntomas psicosomáticos que afectan a la calidad de vida de las personas. De hecho, el estudio publicado por Vingerhoets ponía de manifiesto que las personas que se veían identificadas con este fenómeno declaraban presentar dolores de cabeza, migraña, fatiga, dolores musculares o náuseas, y/o padecer enfermedades virales como la gripe o el resfriado durante sus periodos de descanso. Algo que se vinculó a la dificultad para pasar de un estado intenso de actividad, provocado por el trabajo, a un periodo de relajación o menor actividad, como debería ser el de las vacaciones.
Además, estas personas compartían características comunes, como la gran carga de trabajo, y rasgos de personalidad parecidos, como un gran sentido de la responsabilidad y la dificultad para relajarse. Por eso algunos expertos han relacionado la enfermedad del ocio con el comportamiento o la personalidad, más que con un problema fisiológico, mostrándose escépticos ante este fenómeno.
Teniendo esto en cuenta, ¿podría haber otros factores que explicasen que algunas personas enfermen durante sus vacaciones? Lo cierto es que ya sea en Navidad, el descanso de verano, un puente, o un fin de semana, nuestro comportamiento cambia durante estos periodos y esto podría provocar que nos volviéramos más vulnerables a las enfermedades. De ahí que tomar medidas preventivas sea importante si queremos disfrutar de las vacaciones sin incidencias.

Cómo evitar enfermar en vacaciones
El mayor contacto social, pasar tiempo en espacios de ocio cerrados como un cine o un restaurante, o descuidar hábitos saludables como dormir y descansar bien, son aspectos característicos de los periodos vacacionales que podrían repercutir en nuestra salud.
Además, en Navidad también se da otro factor importante y es que la festividad suele coincidir con la temporada álgida de gripe y resfriados. Por eso es importante tomar medidas preventivas como la de fortalecer el sistema inmunológico durante la temporada de virus respiratorios.
Para lograrlo, cuidar el descanso, reducir el estrés, practicar ejercicio y seguir una dieta equilibrada, será fundamental. La ingesta de determinados alimentos como cítricos, vegetales como las espinacas o el brécol, legumbres como los garbanzos, los frutos secos, las setas, el yogur o el salmón, entre otros, puede resultar de gran ayuda. [3] Además, bebiendo agua regularmente conseguiremos conservar la hidratación de la mucosa, una de las barreras que encuentran los virus y bacterias antes de acceder a nuestro organismo.
Sumado a esto, también se pueden poner en práctica otros consejos útiles como:
- Adelantar las compras navideñas lo más posible en el calendario para así evitar las aglomeraciones en las tiendas y centros comerciales, propias de las fechas. En caso de brote de gripe o resfriado, cuanto más se eviten los espacios cerrados y abarrotados, mejor.
- De cara a las comidas o cenas con amigos, compañeros de trabajo o familiares, será conveniente ventilar el espacio siempre que sea posible u optar por celebrarlas en entornos al aire libre como terrazas, si el clima lo permite.
- Si antes, o durante las vacaciones, se tuviese que viajar en avión, tren o autobús, el uso de las mascarillas podría ser una buena opción para minimizar el riesgo de contagio.
- Extremar las medidas de higiene, lavando las manos con frecuencia y utilizando pañuelos desechables también es fundamental. También será importante protegerse de los cambios bruscos de temperatura.
En caso de enfermar, será conveniente guardar reposo y no tener contacto con otras personas, al menos hasta que pase el periodo de riesgo de contagio. Además, existen preparados indicados para el alivio de los síntomas en los procesos catarrales o gripales como el dolor leve o moderado, la fiebre, los estornudos, o la secreción nasal, además de la tos improductiva.
Entre estos se incluyen aquellos compuestos por paracetamol que reduce la fiebre y alivia el dolor; clorfenamina que ayuda a reducir la secreción nasal y los estornudos, y dextrometorfano que es un antitusivo. Indicados para adultos y adolescentes a partir de 14 años, también existen presentaciones para niños mayores de 6 años y será el profesional sanitario quien mejor podrá aconsejarte sobre su uso, y ofrecerte la solución que mejor se adapte a tus síntomas y necesidades.
No obstante, si los problemas persisten y aunque no sea el mejor plan para unas vacaciones, no dudes en solicitar atención médica.
Referencias
LA “ENFERMEDAD DEL OCIO” PRODUCE TRASTORNOS FÍSICOS Y EMOCIONALES. Boletín UNAM-DGCS-427. [Internet] 2018 [Consultado el 22/10/2025] Disponible en: https://www.dgcs.unam.mx/boletin/bdboletin/2018_427.html
Psychother Psychosom. 2002 Nov-Dec;71(6):311-7. doi: 10.1159/000065992. Leisure sickness: a pilot study on its prevalence, phenomenology, and background. Ad J J M Vingerhoets 1, Maaike Van Huijgevoort, Guus L Van Heck: https://pubmed.ncbi.nlm.nih.gov/12411765/
Las 3 reglas para reforzar el sistema inmunitario. Quirón Salud. [Internet] 2021 [Consultado el 22/10/2025]. Disponible en: https://www.tucanaldesalud.es/es/tusaludaldia/articulos/3-reglas-reforzar-sistema-inmunitario







